jueves, 24 de octubre de 2019

Ad Astra: la necesidad de un padre


Sin duda, la película más comentada y polémica de la cartelera es "Guasón", la lograda y oscura cinta de Todd Phillips que presenta una interesante variante sobre el origen del archienemigo de Batman, el "payaso príncipe del crimen". Por supuesto, no es una película para menores y su mensaje debe ser tomado con pinzas debido a una supuesta humanización del trastornado anarquista. La actuación de Joaquín Phoenix es sobresaliente, por lo que el año próximo lo veremos con varios reconocimientos por su trabajo. Incluso existen hilarantes videos editados en Youtube en los que se muestra a Krusty el payaso de Los Simpson y Quico, el personaje de El Chavo del 8, como si fueran los protagonistas de "Guasón". En medio de toda la ola de comentarios desatada por esta película, hay un estreno que ha pasado casi desapercibido y que merece recomendación: hablamos de "Ad Astra: hacia las estrellas".


Roy McBride (Brad Pitt) en Marte (fuente: webmedius.com)

Dirigida por James Gray, un director talentoso que tiene en su haber los notables filmes "Los dueños de la noche" y "Dos amantes", "Ad Astra, hacia las estrellas" nos presenta al Brad Pitt más reservado, meditativo y melancólico de toda su carrera. En verdad es una sorpresa ver al popular actor en esta clase de papeles, pues con el tiempo demostró ser inteligente para escoger sus papeles y no limitarse a ser una cara bonita. Algo que logró también Leonardo DiCaprio y más recientemente Robert Pattinson con la aun no estrenada "El faro". Pitt interpreta a un astronauta que acepta, en un futuro lejano, viajar hasta la órbita de Neptuno para buscar a su desaparecido padre, interpretado por Tommy Lee Jones, quien hace 16 años estaba abocado a la búsqueda de vida inteligente no terrestre en el Proyecto Lima.

Donatas Banionis y Natalya Bondarchuk en "Solaris" de Andrei Tarkovski (fuente: channel4.com)

Si alguno espera ver la típica película de aventura especial con efectos visuales espectaculares y mucha acción y entretenimiento al estilo Star Wars o Star Trek, se quedará con los crespos hechos, pues "Ad Astra, hacia las estrellas" es una película intimista y filosófica, inspirada en "Solaris", del soviético Andrei Tarkovski y en "El árbol de la vida" de Terrence Malick. Si bien los efectos especiales son extraordinarios, éstos se encuentran al servicio de un guión en el que se pone énfasis en la búsqueda del hijo, de la relación con su padre y de su lugar en medio del grandioso universo. Hay que ser paciente para engancharse con la trama, hasta que te absorbe conforme el personaje va acercándose a su objetivo, en medio de no pocas dificultades.

Una de las varias escenas de evaluación psicológica (fuente: esquire.com)

En lo psicológico, cuando un astronauta permanece solo en el espacio durante muchos, muchos días, puede trastornarse seriamente. Incluso puede sentir pánico. Puede verlo todo borroso, sentirse extraño y no parecerle reales las cosas que le rodean. Aún cuando un astronauta no viaje solo, puede ponerse muy tenso y malhumorado. Por esta razón, las personas que algún día trabajarán en las estaciones o colonias espaciales tendrán que ser enviadas de nuevo a la Tierra al cabo de un mes y otras irán a ocupar sus puestos. De ahí que esta película haga énfasis en el estado de salud emocional del personaje a través de un programa que lo examina y le pregunta continuamente sobre sus pensamientos y sentimientos. Especialmente interesante es una escena cuando se suelta y expresa el vacío dejado por su padre y como éste le inculcó una serie de virtudes que forjaron su carácter ordenado, analítico y responsable.

"Gravedad" de Alfonso Cuarón

Algunos detalles interesantes de la película son la inclusión de los viajes comerciales al espacio,  (con el duty free incluido), las potencias enfrentándose por los recursos minerales de la luna, la experimentación con animales para lograr su adaptación a la vida espacial a fin de contentar a los animalistas del futuro, los piratas que asaltan vehículos terrestres lunares como una suerte de "far west espacial", el ocultamiento de información delicada al protagonista como parte de la política del secreto de Estado, etc. Lo cual demuestra que vaya donde vaya, el ser humano llevará siempre lo bueno y lo malo de su ser, sin importar sus costumbres, religión u origen familiar o cultural.

"2001, odisea del espacio" de Stanley Kubrick

Si la comparamos con la clásica película existencial "2001, odisea del espacio" de Stanley Kubrick, la película que comentamos tiene un ritmo narrativo algo menos pausado y no emplea melodías clásicas en su banda sonora como "El Danubio azul" de Johann Strauss II y no se centra en la evolución del hombre de acuerdo a su naturaleza e inteligencia. La película de James Gray tampoco se inclina por el humor relajado de "Misión rescate" de Ridley Scott, ni en la transición de la desesperación a la fe en "Gravedad" de Alfonso Cuarón, ni en el amor más allá del tiempo y del espacio en "Interestelar" de Christopher Nolan. "Ad Astra, hacia las estrellas" tiene como tema la necesidad afectiva del padre en la vida del ser humano, especialmente en el varón, como parte de su salud mental, su equilibrio espiritual y en su realización social con una mayor tendencia a la autosuficiencia y el orgullo.

Matthew McConaughey y Mackenzie Foy en "Interestelar"

Hoy en día muchos niños crecen en hogares rotos o disfuncionales, criados por madres solteras o divorciadas, pero ellos son los que siempre pagan los platos rotos por la ruptura. Distinto es el caso de un fallecimiento o alejamiento de la casa por razones de trabajo porque si bien dejan un vacío, tienen una causa que no implica un quiebre del vínculo espiritual y afectivo. De ahí que el personaje de Brad Pitt tenga el deseo de saber la verdad acerca de si su padre sigue con vida, pese a su alteración emocional por los años viviendo en soledad y aunque forme parte de un grupo de astronautas en misión de investigación. En todo caso, el vacío emocional del astronauta por la ausencia de su padre se refleja alegóricamente en el descomunal vacío del espacio, especialmente en la intensa secuencia del rescate en medio de los anillos de Neptuno.

James Gray dirigiendo a Brad Pitt (fuente: elmundo.es)

"Ad Astra, hacia las estrellas" es una película notable y emocionante, introspectiva en sus intenciones y poseedora de una factura técnica y narrativa de gran calidad. No se excede en el uso de flashbacks, ni emplea diálogos recargados o pretenciosos o situaciones de cliché. Habla de pensamientos y sentimientos de carácter paterno-filial en medio de la odisea del personaje principal entre astros, y por supuesto, del irreprimible deseo humano de conocer la verdad acerca de nuestro lugar en el universo y del lugar que busca ocupar Dios en el vacío de nuestros corazones. De ahí que no se haya convertido en un taquillazo como "Guasón", sino que está llamada a ser una película de culto y se ganará un lugar entre las mejores películas de 2019. Otro triunfo para el cineasta James Gray y para la estrella Brad Pitt.



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